Los seguros multiriesgo protegen tu comunidad de gastos imprevistos.
Problemas por agua, incendios, pintadas en las fachadas, desperfectos en el tejado… Son situaciones que no aparecen a diario en las comunidades de vecinos pero que, el día que se presentan, pueden ocasionar una derrama que deberá ser abonada equitativamente por los vecinos.
Para evitar estos gastos imprevistos y tan temidos por todos, existe la opción de contratar una póliza Multiriesgo para la comunidad.
Aunque en España no es obligatorio contratar este tipo de seguro, pueden resultar muy útiles ya que en el caso de que suceda un siniestro en el edificio, los inquilinos del mismo no tendrán que hacerse cargo de él.
Además la prima será dividida entre todos los vecinos, por lo que pasará casi desapercibida entre las cuotas pagadas para el mantenimiento del edificio.
Este tipo de seguros es muy flexible y pueden incorporar multitud de coberturas adaptadas a las necesidades de cada comunidad, aunque las más comunes en este tipo de pólizas son:
– Daños materiales ocasionados por incendio, explosión, daños por agua, los atascos de conducciones comunitarias, roturas de cristales o vandalismo.
– Siniestros causado por fenómenos climatológicos.
– Hurto o robo.
– Reparación de daños estéticos causados por el siniestro.
– Responsabilidad civil.
– Defensa jurídica, para que en caso de tener que defender algún asunto ante la justicia, sea la aseguradora y no la comunidad la que corra con los gastos.
A mayores, cada propietario deberá tener en cuenta las coberturas incluidas en el seguro comunitario a la hora de contratar su seguro de hogar para evitar duplicidades o quedar desprotegidos en algún supuesto específico. También es importante tener en cuenta que cualquier daño en la construcción del edificio, será responsabilidad del constructor durante los primeros 10 años.
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