Cuando se trata de la gestión o compraventa de viviendas, hablamos de unos bienes de gran valor que, en muchos casos, corren con el peso de familias enteras, por eso escoger la mejor inmobiliaria es de vital importancia.
Tanto si se trata de comprar una nueva vivienda como de vender o poner alquilar una en tu propiedad, llevar este proceso por tu cuenta puede resultar peligroso por varios motivos: podrías cometer errores graves sin ser consciente de ello y, además de perder dinero, incurrir en faltas legales que te supongan problemas más adelante.
Por ello, tanto si quieres realizar la compraventa de una vivienda como si necesitas apoyo de asesoramiento o gestión, lo mejor que puedes hacer es acudir una inmobiliaria que cumpla con tus necesidades.
La importancia de contar con una buena inmobiliaria
Elegir vivienda es un proceso mucho más complejo de lo que puede parecer en principio, y lo mismo ocurre a la hora de venderla. El apoyo de un buen agente inmobiliario y de confianza te permitirá asegurarte de que se defienden tus intereses y de que no cometes errores graves que pueden no apreciarse a simple vista pero que salen caros más adelante.
Un buen agente inmobiliario proporciona asesoramiento acerca de qué puede ser lo mejor para ti en función de tus intereses y necesidades, informándote con datos del mercado inmobiliario de la zona. A la hora de vender, sus contactos y conocimiento son vitales para poder obtener el mejor precio posible por tu propiedad, llevando a cabo la negociación por ti y la gestión de todo el proceso. Para asegurarte de que tomas que decisión correcta, es importante que tengas en cuenta los siguientes aspectos:
1.Experiencia y reputación
La experiencia y la reputación son indicadores sólidos de la calidad de los servicios que puedes esperar.
2.Conocimiento local
Con un profundo conocimiento local, pueden ofrecer información valiosa sobre vecindarios, escuelas, servicios y tendencias del mercado. Por ejemplo si vives en una región como puerto de la cruz, una buena opción sería zenit85.es.
3.Servicios ofrecidos
Algunas pueden ofrecer servicios integrales que incluyen marketing, tasación, asesoramiento legal y más, mientras que otras se especializan en una sola área. Elige la que mejor se adapte a tus necesidades.
4.Comunicación y empatía
Busca una inmobiliaria que se comunique de manera efectiva y que esté dispuesta a escuchar tus necesidades y preocupaciones.
5.Honorarios y costos
Pregunta sobre comisiones, tarifas adicionales y cualquier otro gasto que puedas incurrir.
6.Red de contactos
Una inmobiliaria con una amplia red de contactos en la industria puede facilitar la búsqueda de compradores o vendedores.
7.Licencia y acreditaciones
Asegúrate de que la inmobiliaria y sus agentes estén debidamente licenciados y acreditados de acuerdo con las regulaciones locales.
8.Contrato y términos
Revisa cuidadosamente cualquier contrato y términos que debas firmar.
9.Referencias
Hablar o buscar opiniones de personas que han trabajado con la inmobiliaria te dará una idea más clara de lo que puedes esperar.
10.Conectarse a la comunidad para saber donde han vendido tus vecinos
Si usas la app para comunidades de propietarios PropApp podrás comunicarte con otros propietarios que te podrán ayudar con sus experiencias, e incluso poder pedir recomendaciones. Registrarse es gratis.
Mucho más que compra, venta y alquiler
Como una buena inmobiliaria local de confianza, se puede tener los expertos que proporcionen muchos servicios esenciales. Desde administración de fincas, para la que cuentan con la Colegiatura correspondiente, a prestar asesoramiento con tasaciones inmobiliarias, contratación y gestión de seguros e incluso otros servicios como el servicio de limpieza y jardinería que muchas comunidades necesitan y que siempre es mejor gestionar de forma externa por ser más cómodo, profesional y evitar conflictos.
Otros servicios son la gestión de hipotecas y apertura de cuentas bancarias, con domiciliaciones y cambios de titularidad en recibos, la declaración anual del Impuesto de No Residentes y otras tasas, la realización de contratos privados de alquiler, venta o traspaso y la parte inmobiliaria de testamentos y últimas voluntades, así como reformas y mudanzas desde y al extranjero.
